La única revista con sólo un 10% de contenido político.

Toda la actualidad de ayer, hoy.

Con esta edición reclamale al kioskero tu mp5 de regalo!
Si no te lo da es por que se lo choreó.




viernes, 10 de diciembre de 2010

no verás la paja en el ojo ajeno.

La frase dominante estadísticamente del fin del siglo pasado y del nuevo (y pedorro) según estudios realizados ad honorem por 5 alumnos del primer año de la carrera de diseño gráfico de una universidad del conurbano sería: "Que paaaaja".

Lo que realmente genera preocupación es la No Sorpresa y la asimilación cuasi automática de este hecho por todos los sectores.

"Ibamos a hacer un estudio sobre eso, mediciones y esas cosas, viste?, pero ... posta posta, nos dio paja y armamos un pijama party y compramos facturas al amanecer escuchando temas de Calamaro", nos dijo Juan Carlos Jenjiskan, sociólogo graduado de la UVA de Chinche, militante del Frente para el Concenso mientras sea lo que nosotros decimos. Y luego agregó:"loco, además, si estudié sociología, era para no laburar, sino hubiese cursado ingeniería".

Qué paso con el "Que onda?", se preguntan frustrados los noventosos. Más tétrico es el panorama para los que vivieron el apogeo de épocas más remotas y que atesoraban su "batime la justa".

Todo eso murió. Kaputt. Desapareció, falleció. Como un Kirchner sin retorno esas frases se borran de la memoria colectiva, de la cotidianidad, y se acumulan en los anales de los nostálgicos recordadores, que de vez en cuando, las atisban en reuiniones de bares, al pasar (aunque hayan sido minucionsamente planeadas), para que finalmente salte, a la fracción de minuto, otro compadre, que haciendo gala de su "contemporaneidad" le dice al ejecutor... "pero que viejo que que estás! dinosaurio! (choto)".

Y si, el mundo cambia.

Las ideologías han muerto (diría, tal vez, Nietzsche).

Twitter nos limita.

Facebook nos hace perder laburos por que un boludo subio las fotos del fin de semana con un pedo marca cañon (esa frase tambien murió) y nos etiqueto. Y nosotros ni sabiamos que estabamos ahí, pero el chabón de recursos humanos sí. (eso no quita que el también sea escrachado, pero como buen profesional 2.0 sabe desetiquetarse al toque).

Y todo, pero todo, lo que se dice todo, es una paja.

Desde hacer trámites, cursar, trabajar, esperar y tomar el colectivo, levantarse temprano, lavarse los dientes, cocinar, ir al chino, hacer un tp, leer el diario, militar para un partido de centroizquierda, mandar un foward, limpiar un cenicero, grabar un cd, lavar los platos, pasear al perro, organizar una revolución armada para derrocar de una vez por todas al estado, organizar las misiones del Teg, subir la escalera, esperar el ascensor.
Todo.
Todo es.
Todo es una paja.

El problema se dará cuando, según la Nasa (Nadie a sabido algo):

1. Tomar una cerveza sea una paja
2. Masturbarse sea una paja.
2 bis. Poner la h a las palabras que usualmente la usen (eso jodería mucho al amor propio de gente que utilice de la letra muda en sus nombres, caso de la gente denominada Hernan, por ejemplo)
3. Y ya, al límite ... dormir sea una paja y...
4. Respirar sea una paja.
4 bis(cocho): Morir sea una paja.

En tiempos de postmodernismo, hay solo una certeza, y no es la relatividad. Sino que nos estamos yendo a la mierda, en todo y a las chapas (frase que aún subsiste por militantes de ella).
Por suerte hay pasiones motoras que, aún sin pedir nada a cambio, nos movilizan a la acción.
Sin ir más lejos, escribir esto, para mí, es una paja, pero hay algo que me motiva a hacerlo. No sé explicar que es. Pero existe, al menos por el momento, así que lo aprovecho, me meto en la ola y lo surfeo.

El "que paja" es la muerte de las pasiones. Cuando era chico pensaba, "que loco (otra frase en extinción) que haya gente que no hace cosas, que se va a un bar a perder la vida, que no tiene iniciativa". La sociedad me dio el primer empujón y yo hice el resto. Termino siendo un "la cagamos entre todos".

No sé, humildemente, si habrá salida de este estado de putrefacción crónico en vida, espero que sí. Como también sé que no me gustaría que la respuesta sea: "Sí, ... pero es una paja".


Estadísticas:

  • 8 de cada 11 personas dicen que paja 1 vez al día.
  • Usualmente hacen uso de la frase son hombres, pero las mujeres cada vez se adecuan más a las circunstancias.
  • 13 de cada 27 personas la dicen como acto reflejo.
  • Los mancos la usan, aunque no puedan físicamente representarla en un acto ritual.
  • 100 personas de cada 38 dicen paja 2 veces cada dos días.
  • el 98% de la gente que dice la frase ronda entre los 7 y los 34 años.
  • el 97% de la gente que dice la frase tiene celulares marca Nokia.
  • el 32% de la gente que dice la frase es parte de la comunidad Movistar.
  • el 0,00003% de la gente que dice la frase es hincha de Gimnasia de La Plata.
  • el 0,00005% de la gente que tiene estudios o trabajo es hincha de Gimnasia de La Plata.

*Datos aportados por el INDEC (Instituto noruego de encuentros cibernéticos)